EL MENSAJE PROFÉTICO DE
GUADALUPE
La Mujer vestida de Sol con la luna bajo Sus Pies
La aparición de la Santísima Virgen
María en México a San Juan Diego en el año 1531 bajo la advocación de Nuestra
Señora de Guadalupe, es una de la más reconocidas debido no solo a que fue un
medio de pacificación entre dos pueblos, (el nativo y el europeo) sino porque
además dejó un testimonio milagroso que aglutinó la mirada no solo de los
creyentes, sino que también atrajo el interés de los hombres de ciencia debido
a la misteriosa naturaleza y profundidad del mensaje plasmado en una tilma
indigena; mensaje que sigue velado en gran parte hasta nuestros días.
Este gran prodigio que
Nuestra Madre Santísima propició aquel 12 de diciembre de 1531 plasmándose a sí
misma en la Tilma
como “Nuestra Señora de Guadalupe” es uno de los grandes signos para esta generación,
a través del cual el Cielo invita al hombre a mirar más allá de nosotros
mismos, motivándonos a una búsqueda trascendental en nuestro destino como hijos
de Dios en la infinitud de la creación y develando a su vez un acontecimiento
universal reservado para el final de ésta generación.
Los rigurosos estudios
científicos, antropológicos y académicos sobre la imagen de la Virgen de Guadalupe han
develado importantes aspectos, siendo los más significativos hasta el momento
lo descubierto en sus ojos () y el mapa de la bóveda celeste () plasmado de
forma extraordinaria en su manto, dejando entrever un claro signo no solo de
unión y protección de la
Santísima Virgen como Madre de la humanidad sino también de
la fusión con eL universo, como MADRE DE TODO LO CREADO, Y SEÑAL DE QUE LO QUE
SE ENCUENTRA EN LA BOVEDA
DEL CIELO NO ES CONTRARIO A LA VOLUNTAD DE SU HIJO.
Esta intervención Divina del
Cielo deja al hombre un signo extraordinario para indicarnos el camino a
transitar de forma que seamos capaces de llegar al conocimiento de la verdad y
así corregir nuestras desavenencias o bien para que mantegamos la Fe viva ante los embates del
mundo.
De acuerdo los mensajes dados
a Luz de María por Nuestro Señor Jesucristo y la Santísima Virgen
es que consideramos observar de manera especial este prodigio, ya que un gran
misterio por develar esta a las puertas de esta generación. Una profecía de
esperanza implícita en la imágen de la tilma la cual interpretamos como un gran
auxilio que el Cielo dará al hombre en el instante de la gran tribulación.
NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
25.09.2017
Oren hijos Míos, oren por
México, tierra de Mi Madre, en donde Ella se encuentra viva y palpitante, en
donde a Sus Pies tienen que gestarse los hombres de paz y bien.
Mi Madre, en la advocación de
Guadalupe, es la Mujer
Vestida de Sol, es la Madre de estos últimos tiempos. Ella contiene el
bálsamo para el instante más álgido de la purificación de la humanidad. EL
AYATE, EN DONDE SE ENCUENTRA MI MADRE, SERÁ SEÑAL PARA LA HUMANIDAD, CON UNA GRAN
MANIFESTACIÓN QUE NO ESPERA MI PUEBLO Y SORPRENDERÁ A TODA LA HUMANIDAD. SERÁ
VISIBLE A TODOS Y CORROBORADA POR LA CIENCIA.
NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
12.12.2016
CON LA HUMILDAD QUE
CARACTERIZA A MI MADRE, ASÍ SE ENTREGA A MI PUEBLO, EN UN AYATE, EN EL QUE SE
ENCUENTRA PLASMADO EL GRAN TESORO DE NUESTRA VOLUNTAD...
LA SANTISIMA VIRGEN MARIA
11.03.2015
YO VENGO A APLASTAR LA CABEZA DE LA SERPIENTE…
YO VENGO A PRESENTAR A LA HUMANIDAD AL ENVIADO
DE MI HIJO PARA QUE SE ENFRENTE Y DERROTE AL ANTICRISTO, ENGAÑADOR DEL PUEBLO
TIBIO DE MI HIJO.
LA SANTISIMA VIRGEN MARIA
11.12.2013
AMADOS MÍOS, YO COMO
EMPERATRIZ DE LAS AMÉRICAS, DEBO COMUNICARLES QUE DE LAS AMÉRICAS SALDRÁ CON
FUERZA LA LUZ A
TODA LA HUMANIDAD PARA
RESCATAR AL PUEBLO FIEL.
() Los ojos de Guadalupe
constituyen uno de los grandes enigmas para la ciencia, como han constatado los
estudios del ingeniero José Aste Tönsmann quien estudió durante más de veinte
años la imagen impresa de la
Virgen en ese tosco tejido hecho con fibras de maguey.
Si bien sus dimensiones son
microscópicas, el iris y las pupilas de los ojos de la imagen tienen impresa al
menos la imagen sumamente detallada de trece personajes. Las mismas personas
están presentes tanto en el ojo izquierdo como en el derecho, con diferentes proporciones,
al igual que sucede en los ojos de un ser humano que refleja los objetos que
tiene en frente. Según las conclusiones del estudio, reveladas por Aste
Tönsmann, nos encontramos ante una imagen “que no ha sido pintada con mano de
hombre”.
() De acuerdo con el doctor
Juan Homero Hernández Illescas se comprueba, con admirable exactitud, que en el
manto de la Virgen
de Guadalupe está reproducido el cielo del momento de la aparición: la mañana
del solsticio de invierno de 1531.
En el manto están representadas
las estrellas más brillantes de las principales constelaciones visibles desde
el Valle del Anáhuac aquella madrugada del 12 de diciembre de 1531. Allí están
las constelaciones completas. Las estrellas se encuentran agrupadas como en la
realidad. Deslumbrantes testimonian la grandeza del milagro.
[Con información tomada del
libro de Dr. Juan Homero Hernández Illescas, Pbro. Mario Rojas, Mons. Enrique
Salazar, La Virgen
de Guadalupe y las Estrellas, Centro de Estudios Guadalupanos].